UN BUEN DIA

Ayer gasté 60 dólares en comestibles

tomó el autobús a casa,

Llevé ambas maletas con dos brazos buenos de regreso a mi estudio.

y me preparé la cena.

Es posible que tú y yo tengamos diferentes definiciones de un buen día.

Esta semana, pagué el alquiler y la factura de mi tarjeta de crédito,

Trabajé 60 horas entre mis dos trabajos,

solo vi el sol en mis roturas de cigarrillos

y dormí como una roca.

Usado con hilo dental por la mañana

cerré mi puerta,

y se acordó de comprar huevos.

Mi madre está orgullosa de mí.

No es el tipo de orgullo del que se jacta en el campo de golf.

Ella no combate temas como «Mi hija entró en Yale»

con «Oh, sí, mi hija se acordó de comprar huevos»

Pero ella está orgullosa.

Mira, ella recuerda lo que vino antes de esto.

Las semanas en las que olvidé cómo usar mis músculos

cómo me quedaría en silencio como una espesa niebla durante semanas.

Ella pensó que cada llamada telefónica de un número desconocido era el aviso de mi suicidio.

Estos fueron los días malos.

Mi vida era un regalo que quería devolver.

Mi cabeza era una casa de grifos goteando y bombillas quemadas.

Depresión, es un buen amante.

Tan atento; tiene esta forma innata de hacer todo sobre ti.

Y es fácil olvidar que tu dormitorio no es el mundo,

Que las sombras oscuras que arroja tu dolor no son una iluminación ambiental.

Es más fácil permanecer en esta relación abusiva que solucionar los problemas que ha creado.

Hoy dormí hasta las 10,

Limpié todos los platos que tengo,

peleó con el banco,

se encargó del papeleo.

Tú y yo podríamos tener diferentes definiciones de la edad adulta.

No trabajo por un salario, no me gradué de la universidad,

pero ya no hablo por los demás,

y no me arrepiento de nada por lo que no pueda disculparme de verdad.

Y mi madre está orgullosa de mí.

Quemé una casa de depresión

Pinté sobre murales de escala de grises,

y fue difícil reescribir mi vida en una que quería vivir

Pero hoy quiero vivir.

No salivaba con cuchillos afilados

o envidiar al chico que se arrojó por el puente de Brooklyn.

Acabo de limpiar mi baño,

Lavó la ropa,

llamó a mi hermano.